FERRARIS, Joseph Jean conde de. Carte Chorographique des Pays-Bas Autrichiens Dédiée à leurs Majestés Impériales et Royales… gravée par L.A. Dupuis. S.l., 1777.
Mapa grabado dividido en 25 grandes láminas numeradas de dimensiones variadas compuestas en total por 450 planchas pequeñas cortadas y ensambladas de aproximadamente 20 x 13 cm cada una. El conjunto de las 25 láminas está montado sobre tela con el número de la lámina inscrito a mano en tinta en el reverso de la tela. La mayor parte de las láminas fue coloreada a mano en la época. Las láminas I, XI, XVII, XIX y XXI están solo parcialmente coloreadas. El conjunto se conserva en 6 estuches de becerro jaspeado adornados con rulinas doradas y piezas de título de tafilete rojo en el lomo de los estuches. Estuches de la época.
Dimensiones totales del mapa con las láminas puestas una al lado de la otra: aproximadamente 400 x 280 cm. Dimensiones de cada uno de los estuches: 205 x 145 mm.
Precioso mapa militar de muy gran formato (escala 1:86400) de los Países Bajos austríacos que muestra lo que corresponde hoy en día a Bélgica, Luxemburgo, parte de los territorios alemanes y neerlandeses y al norte de Francia.
A partir de 1741, el gobernador general de los Países Bajos austríacos, Charles-Alexandre de Lorraine, desea defender los intereses de los Países Bajos. Alienta simultáneamente el progreso de la Ilustración y el desarrollo económico, patrocinando empresas como la creación de la Academia Teresiana de Bruselas (1772), la realización por el Conde Joseph de Ferraris de un mapa muy preciso del territorio (1770-1778), o diversas experiencias técnicas e industriales en su castillo de Tervuren.
El mapa de Ferraris o «mapa de los Países Bajos austríacos» es un mapa histórico establecido entre 1770 y 1778 por el conde Joseph de Ferraris, director de la escuela de matemáticas del cuerpo de artillería de los Países Bajos, con el apoyo del gobernador Charles de Lorraine. Es la primera cartografía sistemática y a gran escala, tanto en «Bélgica» como en toda Europa occidental.
El conde de Ferraris se dio a conocer por este mapa publicado por su iniciativa en 1777, donde todos los Países Bajos austríacos se presentan con el menor detalle. Es el primer mapa topográfico de Bélgica, basado en un levantamiento de terreno, producido bajo la administración del emperador José II y de la emperatriz María Teresa. El trabajo de levantamiento topográfico comenzó en 1771 y se llevó a cabo en el territorio que hoy es belga y luxemburgués así como en parte de los territorios alemanes y neerlandeses. Fue realizado por estudiantes de la Escuela de Matemáticas del Cuerpo de Artillería de los Países Bajos.
Totalmente realizada y dibujada a mano por los alumnos oficiales, la carta de Ferraris tenía una vocación exclusivamente militar: delineaba los elementos estratégicos más importantes como, por ejemplo, los ríos, los puentes o los caminos hundidos que permitían ocultar tropas.
En 7 años, el trabajo fue terminado, siendo el resultado un mapa manuscrito inmenso a escala I:11520, la «Carta de Gabinete». Entre 1773 y 1777 un equipo de grabadores franceses compuesto por L.A. Dupuis, Patas y B.A. Nicollet trabajó en la realización de la versión grabada de este mapa.
Así publicaron en 1777, a escala 1:86400, este magnífico mapa rico en numerosos detalles, que cuenta con 450 planchas pequeñas distribuidas en 25 láminas. Entre las 25 láminas, el mapa cuenta con una explicación (lámina I), un título en un cartucho elaborado (lámina XI), una bonita vista que muestra la presentación del mapa al emperador José II (lámina XVI), un plano de Bruselas (lámina XXI), un mapa general (lámina XXII) y un índice (lámina XXIII). La mayor parte de las planchas pequeñas ha sido además soberbiamente coloreada a mano en la época.
Sin sistema de referencia, el mapa informa sobre el relieve, la ocupación del suelo, el hábitat, la red vial y la red hidrográfica, la organización parroquial así como los límites administrativos de la época. Numerosos enclaves son visibles. Algunos de ellos, pertenecientes al territorio francés en 1770, solo han sido parcialmente cartografiados.
Este mapa, compuesto con fines militares, es sin embargo el testimonio de un territorio transformado desde entonces por la industrialización.
Magnífico conjunto en perfecto estado de conservación.